La crisis sanitaria a nivel mundial que estamos sufriendo desde 2020 ha cambiado las prioridades y las necesidades en muchos aspectos sociales, incluida la importancia que le damos a nuestra vivienda.
Esta pandemia ha supuesto una remodelación económica, sanitaria y mental para todas las sociedades del mundo, y la limitación de libertades y las duras medidas de confinamientos en los hogares han cambiado las prioridades de las personas a la hora de adquirir una vivienda.
Al vernos confinados en casa nos hemos dado cuenta de la gran importancia que tiene la vivienda, en lo fundamental que es tener espacios abiertos, y una casa bien distribuida que haga la vida mas cómoda. Antes de la pandemia, tener una terraza, balcón o una zona verde no era uno de los requisitos fundamentales de los propietarios, pero ahora con esta realidad muchos propietarios han buscado alternativas para cambiar de hogar y que cumpla con los requisitos perdidos durante el confinamiento. Esto ha supuesto un auge de la construcción industrializada.
Mientras que en otros países europeos este modelo de construcción llega a suponer un 61% del sector, en nuestro país, España, su crecimiento hasta ahora había sido lento suponiendo al menos un 1% de la representación del sector.
¿ A que se debe el aumento de demanda de las casas prefabricadas?
Como comentábamos en párrafos superiores la pandemia sanitaria ha hecho cambiar la mentalidad que teníamos sobre nuestra vivienda y sobre todo las prioridades y expectativas que queremos. Al ver limitada nuestra libertad al aire libre la mentalidad ha cambiado y ahora se buscan viviendas que nos aporten calidad de vida y posibilidades al aire libre.
Todo esto se puede conseguir con una casa prefabricada, pero además hay otros factores claves que han hecho el aumento de la demanda posible, como:
- Plazos de entrega mas cortos: así es, la construcción prefabricada tiene una entrega mucho mas corta que la construcción tradicional. Esto supone que en 4/5 meses el cliente puede disponer de su vivienda totalmente acabada. Algo fundamental y decisivo en los tiempos que corren.
- Sin imprevistos: al realizarse la construcción íntegramente en una fabrica, esta todo absolutamente supervisado y controlado. Lo que evita fallos en la cadena de construcción o retrasos por condiciones meteorológicas.
- Respetuosas con el medioambiente: son casas que no producen tanto CO2 durante su fabricación por tanto su nivel de contaminación es muy inferior comparado con el de una vivienda tradicional.
- Amplio abanico de diseños: las casas prefabricadas proporcionan al cliente una casa a medida con llave en mano. Donde se puede elegir cualquier acabado, diseño o distribución.
- Viviendas de eficiencia energética: y por tanto mas económicas. La construcción industrializada permite crear casas de alta eficiencia energética, proporcionando un ahorro constante para el propietario.
Todas estas ventajas unidas a la pandemia del COVID, han abierto los ojos a muchas personas, y se han dado cuenta de que su casa no les gusta o no es lo que necesitan después de tanto tiempo.
Las casas pasivas, las casas saludables, que priman el espacio exterior, la luz y la sostenibilidad se han abierto un amplio espacio en el sector y su demanda no hace mas que aumentar en cuanto se conocen las numerosas ventajas que aportan a sus propietarios y que son determinantes para elegir un hogar en este futuro nuevo e incierto que tenemos por delante.